lunes, 6 de julio de 2009

Camilo José Cela: Política es todo, es hasta respirar.

Abril 1978
Camilo José Cela; parco, comedido, algo teatral, como un reflejo de sí mismo; siempre a la expectativa tras la máscara de una figura convencional que debe mantenerse.
Irónico e inflexible, filómano filólogo, redentor de inveterados vocablos presos del desuso lingüístico. Copioso creador en la soledad fértil y voluntariosa de sus doce horas de trabajo casi diario. Pluriempleado de sí mismo, en la confección de su próxima novela:”Oficio de Tinieblas cinco”.
-¿Dónde acabaron sus estudios universitarios? ¿Qué estudios tiene?
- No acabaron; mis estudios en la Universidad no acabaron. Yo soy doctor pero no Licenciado, Doctor Honoris Causa en una Universidad extranjera.
-¿Aparte de este título honorífico tiene Vd. otros estudios?
- Hombre no; le parece Vd. poco doce años en la Universidad.
-¿Por qué abandonó C-J.C. la poesía?
- No , no la abandoné, esto es falta de información por su parte, publico constantemente en las revistas de poesía.
- A partir de “La Colmena” se comenta que C.J.C. ha ido descendiendo estrepitosamente. Su producción posterior parece más bien producto de un equipo de
- Yo no comento, la gente que diga lo que quiera.
-¿Qué ha visto en Quevedo y en el Siglo de Oro español?
- Los escritores más grandes que se produjeron en la literatura española jamás.
- En 1.955 fundó la revista “Papeles de Son Armadams”, según tengo entendido prometió una ayuda a la cultura mallorquina. ¿Qué ha hecho Vd. por ella?
-¿Quién le dijo a Vd. eso y cómo lo dije?
- Es un comentario.
- Ah!! perdón, hay que venir más informado.
- ¿Ha perdido C.J.C. la originalidad?
- No lo sé, esto allá cada cual. Le insisto a Vd. en decir que lo que los demás piensan o me achaquen es a los demás a quien debe preguntarlo, yo no hablo de esto.
-¿Cree que asistimos a un resurgir de la novela española?
- Hombre, tanto como resurgir no, estamos en un momento confuso que qué yo creo será fructífero al cabo del tiempo en escritores jóvenes muy interesantes en este género; ya lo creo.
- Qué opina del “boom” de la literatura Sudamérica?
- Esto es un fenómeno puramente comercial, estos escritores eran muy buenos sin duda alguna, o lo son; pero también lo eran sus padres y sus hermanos mayores en la literatura y aquí no se había enterado nadie; era falta de información. Estos tuvieron un lanzamiento adecuado del cual yo me alegro particularmente mucho. Y aquí la gente se ha enterado de lo que ya sabíamos todos, que era de existencia de estos escritores.
- ¿Cree que el marxismo puede ser la moral del futuro?
- Bueno no es que lo crea, es que es evidente.
-¿Se considera Vd. un hombre político?
- Mire, política es todo, es hasta respirar.
-¿Regionalista o surrealista?
- Bueno yo creo que la linde sería muy difícil de establecer, yo creo que esta va- qué sé-según fases de la luna o digestiones o vaya Vd. a saber lo que….
-¿Quién es C.J.C.? ¿Qué hace? ¿Para qué? Y ¿Por qué?
-Habría que escribir un libro de cuatrocientas páginas y no por mí. Soy un ser vivo que procura pasar por esta vida sin hacerle demasiado la puñeta a nadie. Viviendo, creo que honradamente, de aquello que me gusta hacer.
- ¿Qué le parece el ambiente intelectual en Mallorca? ¿Lo hay?
- Probablemente sí, lo que pasa es que estoy un poco ajeno, bien a mi pesar, porque yo el catalán lo puedo leer, pero no hablar y en todo caso siempre con ciertas…
-¿Qué opina de la violencia? ¿Cree que hay situaciones que la justifican o por el contrario la considera reaccionaria en cualquier situación?
- En general yo la considero reaccionaria. Esto es; los dos tipos más reaccionarios que produjo el Siglo XX. me refiero sólo a muertos, fueron Hitler y Stalin que eran dos hombres violentos. Yo creo la violencia engendra más violencia. Ahora bien, hay momentos en que al margen de que se justifique o no se justifique, a la gente-sobre todo a la gente joven- se la acaba la paciencia y probablemente con más razón que a un santo.
- En una entrevista que le hizo Salvador Pániker, decía Vd. que España era una vieja esperanza. ¿Continúa siéndolo a su modo de ver?
-Hombre, claro que es una esperanza; por lo menos prefiero pensarlo.
- Qué hace actualmente C.J.C.?
- Hoy estaba, cuando Vd. vino, haciendo, vamos redactando, trabajando en una novela que titulo: “Oficio de Tinieblas cinco”. En esto estoy metido, a llevo bastante adelantada y confío en acabarla dentro de un par de meses digamos.
- ¿Puede adelantarnos algo de la temática?
- No, en absoluto, lo que tengo que decir lo digo allí, las novelas no son convertibles en píldoras.
- la Real Academia de la Lengua, ¿sigue fijando, brillando y dando esplendor o se ha quedado un poco vieja?
- No; cumple su misión, lo que pasa es que muchas veces la gente quiere que las funciones que cumple la Academia o cualquier otra institución fuesen otras. Y entonces lo que pasa es que no hay una acomodación de causa y efecto.
- Si yo le dijera que últimamente se opina que C.J.C.es un escritor burgués, dormido en los laureles de cuatro buenas obras escritas en mejores tiempos ¿Qué me diría?
- Bueno, me parecerá muy bien, ya le dije a Vd. que digan misa ¿no? Que por cierto en esto no que “digan misa” es una elocución que hay que poner de nuevo en circulación, porque cada vez son más los curas que cuelgan los hábitos. ¿O sea que quizá parte de los jóvenes críticos pudieran suplirlos no?
- Hablando de curas. ¿Ha leído el último libro del P. Díaz Alegría?
- Si, y me parece la obra de un hombre fundamentalmente honesto, lo cual no es poco.
- ¿Qué sentido tiene la existencia para Vd.?
- Yo creo en las viejas normas de que es: nacer, crecer, reproducirse y morir y Santas Pascuas.
- ¿Se ha drogado alguna vez?
-No; bueno, en África fumé marihuana, claro pero no me gustó así mucho, me gustaba más el tabaco de la Tabacalera. Y además no tuve ningún sueño extraño, ni nada, que mereciese la pena de entonces hace treinta años o más. Ahora eso es una droga para pobres, es una droguita. Si Vd. se refiere a las drogas más fuertes, heroína y todo eso, no, eso no.
- ¿Qué opina del amor y de la muerte?
-Pero Vd. me está haciendo preguntas para que escriba un libro de quinientas páginas; el amor, mire Vd. esta novela que estoy escribiendo ahora está suficientemente erotizada para que se pueda entender qué es lo que yo pienso del amor; ahora bien, una definición así abreviada o didáctica yo no sé hacerla. Y en cuando a la muerte, es una abdicación claro, de esto no hay duda ninguna, si se concibiera- supuesto totalmente fuera de toda razón claro- el hombre que se aferrase a la vida de forma absoluta no se moriría.
- ¿Cree que el novelista puede hacer una labor positiva dentro de un sistema político opresivo?
- Tanto como positiva…Creo que cumple con su conciencia al intentarlo; ahora que eso tenga un efecto sobre las gentes ya lo dudo más, sobre todo en un país donde la gente pues no lee demasiado.
-¿Qué opina de la censura?
-Que voy a opinar, me parece un dislate, pero es más: creo que ni sirve ni siquiera al Régimen o a la idea que en teoría debería defender y es una balanza, si en un platillo pudiésemos los inconvenientes que reporta al Régimen-no quiero decir al país-y sus ventajas, pues a lo mejor eran más los inconvenientes.
- ¿Ha visitado alguna vez un siquiatra?
- No, nunca, ni doy mayores síntomas de necesitarlo, perdón, o me lo creo y eso que soy amigo de bastantes.
- ¿Qué hace C.J.C. por los demás?
- Yo no creo en la caridad, yo creo en la justicia.
- ¿Pero no opina que la justicia dice por ejemplo: hasta aquí, es decir señala unos límites, mientras que la caridad no tiene límites?
- Pues probablemente sí, ahora ya sigo creyendo en la justicia. Esto es yo no creo que haya que socorrer a un pobre, yo lo creo es que hay que tener un sistema lo bastante justo para que este pobre no se produzca.

- ¿Cuál es la noticia de Camilo José Cela en este mundo en el que está Vd. encerrado?
-Pues la noticia es “Oficio de Tinieblas cinco”. Hoy estoy aquí desde las ocho de la mañana y todavía no he bajado a tomarme un vaso de vino cosa que haré dentro de un rato. Cálculo que a finales de Mayo o la primera quincena de Junio podre entregar el fajo de cuartillas al Editor. Será una novela extensa como San Camilo, aunque en general los libros míos no son disparatadamente extensos, claro que yo tampoco me he propuesto escribir un determinado número de cuartillas, el tema da lo que dá.

- Y Camilo José Cela también da lo que dá -que no es poco- pese a que en el clisé de su imagen siempre quede alguna pose más o menos repetida, más o menos conocida.


Abril 1.978