Tarabulus versus Trebalug [1]
En Menorca corresponde, básicamente, al margen de otras derivaciones modernas, a dos lugares:
A) El torrente de Trebalúger que se embalsa abundantemente en su desembocadura, en forma de ría, en un lugar llamado aún hoy “S´Estany” (y en cuya ladera se hallan importantes y densos conjuntos prehistóricos [2]como los de Trebalúger (Coster de S´estany); “Son Carabassa” (Tancas de Es forn de calç, Sa Cova y Sa vinya). Así como “Sa Pleta de Ses Cases”, “Torres de S´Aljub”, y el “Corral des Ravellar”.
B) Trebalúger. Uno de los conjuntos talayóticos más grandes y antiguos de Menorca, en la zona de “Es Castell”, construido sobre un hábitat anterior. Se halla junto a “Sant Lluís”, una zona proclive al embalse de aguas; a menos de 1 kilómetro y medio de la zona pantanosa donde esta ubicado el Aeropuerto de Menorca; tierras de la antigua posesión de Llucmaçanes.
Respecto a Trebalug, el tema *Treb- es habitual en el grupo céltico; como se deduce del irlandés antiguo: “treb” = habitación, galés “tref”; y bretón antiguo: “treb” = lugar habitado, etc.[3]
Pero pudiera ser anterior; de la época de los Campos de Urnas, sorotáptico como sugiere Joan Corominas en su Onomasticon Cataloniae [4] basándose en J. Pokorny (I.E.W. 1090) ya que “Traba” es “edificación” y se da con formas apofónicas “Treba-“, “Tarb”. Esta raíz indoeuropea está relacionada con nuestra palabra “tribu”
Evidentemente nos hallamos ante una palabra compuesta cuya primera parte procede de la raíz indoeuropea *TREB con significado de morada, vivienda, habitación, pueblo, tribu, lugar habitado etc.[5]
Algunos ejemplos así lo muestran: “TREB”= vivienda, en Galés, Bretón antiguos, Irlandés medio o “THERP” en Frisón antiguo. Y “THORP”= villa, población.
Esta “asociación entre la raíz *TREB y otro elemento hidrónimo está bien atestiguada en otros ejemplos del área paleo europea, lusitana y céltica.
Así TREBARUNA: (Beira portuguesa y Soria en España. En el Sur del Tajo hay muchas aras votivas a Trebaruna) y TRIBORUNNIS, (Cerca de Lisboa) en donde el investigador A. Tovar ha establecido una relación con el hidrónimo galo “ARONA” y la Dra. Blanca Prosper propone para ARUNIS una denominación paleo europea de: “curso de agua “y también TREBOPALA (Baja Andalucía) y (Cabeço das Fraguas, Portugal). TREBAGO (Soria), con su antiguo castro celtibérico junto al río Añamaza.
En donde “Pala” deidad Lusitana, ha sido tomada en préstamo de otro grupo lingüístico, posiblemente una lengua paleo europea cuya raíz *PEL o *PAL parece haber significado “agua estancada “[6]. Además el radical *TREB es frecuente en la toponimia celtibérica: Contrebia Belaisca, Contrebia Carbica, Contrebia Leukade, etc.
La mayoría de los topónimos actuales se dan en antiguas zonas lusitanas o celtibéricas[7].
La segunda parte corresponde al paleoeuropeo, ilírico y céltico *LUCO, gaélico “Lough”, equivalente a laguna, pantano o ría, es decir, un hidrónimo. Resulta evidente que ambos topónimos, tanto el Trebalug de S´Estany del Torrente de Trebalug y el Trebaluger del conjunto talayótico junto a la antigua zona pantanosa de LLucmaçanes nos remiten al mismo significado: “Las poblaciones de la laguna” o “Los lugares habitados junto a la laguna”.
Por eso, se me hace muy difícil considerar, filológicamente, la derivación propuesta por M. Barceló en su artículo “Loquella barbarica” II (Rev. Faventia, 22/1; 2000, pp.87-110) que propugna un originario Tarabulus (Trípoli) para explicar este topónimo.
Respecto a Trebalug, el tema *Treb- es habitual en el grupo céltico; como se deduce del irlandés antiguo: “treb” = habitación, galés “tref”; y bretón antiguo: “treb” = lugar habitado, etc.[3]
Pero pudiera ser anterior; de la época de los Campos de Urnas, sorotáptico como sugiere Joan Corominas en su Onomasticon Cataloniae [4] basándose en J. Pokorny (I.E.W. 1090) ya que “Traba” es “edificación” y se da con formas apofónicas “Treba-“, “Tarb”. Esta raíz indoeuropea está relacionada con nuestra palabra “tribu”
Evidentemente nos hallamos ante una palabra compuesta cuya primera parte procede de la raíz indoeuropea *TREB con significado de morada, vivienda, habitación, pueblo, tribu, lugar habitado etc.[5]
Algunos ejemplos así lo muestran: “TREB”= vivienda, en Galés, Bretón antiguos, Irlandés medio o “THERP” en Frisón antiguo. Y “THORP”= villa, población.
Esta “asociación entre la raíz *TREB y otro elemento hidrónimo está bien atestiguada en otros ejemplos del área paleo europea, lusitana y céltica.
Así TREBARUNA: (Beira portuguesa y Soria en España. En el Sur del Tajo hay muchas aras votivas a Trebaruna) y TRIBORUNNIS, (Cerca de Lisboa) en donde el investigador A. Tovar ha establecido una relación con el hidrónimo galo “ARONA” y la Dra. Blanca Prosper propone para ARUNIS una denominación paleo europea de: “curso de agua “y también TREBOPALA (Baja Andalucía) y (Cabeço das Fraguas, Portugal). TREBAGO (Soria), con su antiguo castro celtibérico junto al río Añamaza.
En donde “Pala” deidad Lusitana, ha sido tomada en préstamo de otro grupo lingüístico, posiblemente una lengua paleo europea cuya raíz *PEL o *PAL parece haber significado “agua estancada “[6]. Además el radical *TREB es frecuente en la toponimia celtibérica: Contrebia Belaisca, Contrebia Carbica, Contrebia Leukade, etc.
La mayoría de los topónimos actuales se dan en antiguas zonas lusitanas o celtibéricas[7].
La segunda parte corresponde al paleoeuropeo, ilírico y céltico *LUCO, gaélico “Lough”, equivalente a laguna, pantano o ría, es decir, un hidrónimo. Resulta evidente que ambos topónimos, tanto el Trebalug de S´Estany del Torrente de Trebalug y el Trebaluger del conjunto talayótico junto a la antigua zona pantanosa de LLucmaçanes nos remiten al mismo significado: “Las poblaciones de la laguna” o “Los lugares habitados junto a la laguna”.
Por eso, se me hace muy difícil considerar, filológicamente, la derivación propuesta por M. Barceló en su artículo “Loquella barbarica” II (Rev. Faventia, 22/1; 2000, pp.87-110) que propugna un originario Tarabulus (Trípoli) para explicar este topónimo.
NOTAS:
[1] Antoni Ramis (A. Ramis i Ramis Noticias...fasc. IV, 1829, p.15) escribe TRABALUJA, TRABULUGE y TRABALUGE. Joan Ramis y Ramis “Alquerías de Menorca” (1815) escribe TREBALUJA. El Archiduque Luis Salvador de Austria en su monumental obra: “Die Balearem in Wort und Bild geschildert” (9 Vol. Leipzig 1869-1891) cita el talayot de “TREBALUG”.
[2] Josep Mascaró Passarius en su “Prehistoria de Menorca” (Ed. Nura 1980) realiza un sucinto estudio de la población prehistórica de la isla y entre los núcleos habitados de entre 5 y 20 habitantes cita: Llucmaçanet, LLucatx, Tot LLuc, LLucassaldent, LLucmaçanes. Entre los de 50 habitantes: Trebalúger (St. Ll.) y “Son Carabassa” (Barranc de Trabalúger). Datos interesantes para establecer una relación entre estos topónimos y los núcleos habitados de época prehistórica.
[3] Blanca Prósper. “El teónimo paleohispano Trebarune”. Rev. Veleia, nº 11 (1994) pp. 187-196
[4] Corominas, Joan. “Onomasticon Cataloniae”. Tomo VII. Ed. Curial.Barcelona 1997 p. 252
[5] Francisco Villar, especialista en paleolingüística de la Universidad de Salamanca comenta en una de sus obras: “palabras bien identificadas en el ámbito de las lenguas indoeuropeas como *TREB <<>>..... Cada comunidad ha de tener un abrevadero estable, que normalmente será de su dominio o propiedad (exclusiva o eventualmente compartida con otras comunidades). Los primeros miembros de compuesto TREBO y VIS son expresiones alternativas de esa comunidad propietaria...”. Como dice el Dr. Jürgen Untermann: “En las lenguas itálicas y en menor medida en las lenguas celtas, toutā y treb- constituyen el campo semántico de “comunidad”, “pueblo” y “casa” ( Rev. Paleohispánica, nº 1. Zaragoza 2001 p. 191)
[6] Con todo tipo de reservas, no convendría dejar de lado la posibilidad de que el nombre de Palma (Palma de Mallorca), esté relacionado con la raíz paleo europea *PAL que significa “agua estancada”, “charca”, “estanque”. Ya Krahe preconizó que *PAL equivalía a “pantano”. También *AMA o *MA es una raíz paleo europea referida al agua. Nada tendría que ver el nombre de Palma con las palmas de la victoria del general Q. Cecilio Metelo, según la tesis tradicional propugnada por Schulten, (R.E. XXXVI, 257ss.) y sí con la “mar petita” antigua desembocadura natural del torrente de “Sa Riera” y los restos prehistóricos que existen bajo la Palma romana. Cobra sentido así la leyenda referida a la cabecita de moro de bronce colocada en la calle Jovellanos, en la confluencia entre el Borne y la Plaza Joan Carles I y que pasaría a indicar no actos públicos de cortar cabezas de prisioneros moros como se dice, sin documentar, sino símbolo popular de un antiguo topónimo referido al “cap” o principio de esta zona pantanosa. El “cap del möor”. Igual que “Es cap des Moro” al final de la “zona pantanosa” o “moor” de “S´amarador” y “Na Mera” en Santanyí.
Esto explicaría también otro topónimo del Repartiment: “Palma alta” en la zona de Son Sardina”. Ejemplos de hidrónimos existen muchísimos: El latín “Palus” pantano, el griego “Palkos” fango, el lituano “Palios” tierras pantanosas, el letón “Palas” orillas encharcadas o pantanosas, el a. I. Palvala = pantano etc.
Bastantes ríos peninsulares llevan esta raíz: Arroyo Palanca (Vilches, Jaén),Arroyo Palancon ( Almería), Palantia o actual Palencia, (referido al río Carrión), río Palancia en la provincia de Valencia, río Palancar y arroyo del Palancar en Córdoba, arroyo Palancares en Jaén, Palancar en Málaga etc. El Palmer en la albufera de Valencia, “Es Palmer” en las lagunas de “Ses Salines” en Mallorca. Lo corriente era recurrir a pequeños topónimos indígenas latinizados, cuando la ciudad venía a continuar unos núcleos anteriores, aunque hubiese alguna variación en el emplazamiento
[7] “Traba” en Coruña, “Trabada” en Lugo y Asturias, “Trabadillo” y “Trabanca” en Salamanca, “Trabaledo” en León, “Trebago” en Soria. etc. Puede consultarse: Fco. Villar, Revista Kalathos, 13-14, Teruel 1993-95, pp. 355-388), (Blanca Prósper. “El Teónimo paleohispano Trebarune”, Revista Veleia, 11, pp.187-196, 1996).(S. Lambrino: “La déese celtique Trebaruna”, Buletin des études portugaises, 20, 1957, pp. 87-109). / A. Tovar en “Études Celtiques nº11,237-268, 1967)
[1] Antoni Ramis (A. Ramis i Ramis Noticias...fasc. IV, 1829, p.15) escribe TRABALUJA, TRABULUGE y TRABALUGE. Joan Ramis y Ramis “Alquerías de Menorca” (1815) escribe TREBALUJA. El Archiduque Luis Salvador de Austria en su monumental obra: “Die Balearem in Wort und Bild geschildert” (9 Vol. Leipzig 1869-1891) cita el talayot de “TREBALUG”.
[2] Josep Mascaró Passarius en su “Prehistoria de Menorca” (Ed. Nura 1980) realiza un sucinto estudio de la población prehistórica de la isla y entre los núcleos habitados de entre 5 y 20 habitantes cita: Llucmaçanet, LLucatx, Tot LLuc, LLucassaldent, LLucmaçanes. Entre los de 50 habitantes: Trebalúger (St. Ll.) y “Son Carabassa” (Barranc de Trabalúger). Datos interesantes para establecer una relación entre estos topónimos y los núcleos habitados de época prehistórica.
[3] Blanca Prósper. “El teónimo paleohispano Trebarune”. Rev. Veleia, nº 11 (1994) pp. 187-196
[4] Corominas, Joan. “Onomasticon Cataloniae”. Tomo VII. Ed. Curial.Barcelona 1997 p. 252
[5] Francisco Villar, especialista en paleolingüística de la Universidad de Salamanca comenta en una de sus obras: “palabras bien identificadas en el ámbito de las lenguas indoeuropeas como *TREB <<>>..... Cada comunidad ha de tener un abrevadero estable, que normalmente será de su dominio o propiedad (exclusiva o eventualmente compartida con otras comunidades). Los primeros miembros de compuesto TREBO y VIS son expresiones alternativas de esa comunidad propietaria...”. Como dice el Dr. Jürgen Untermann: “En las lenguas itálicas y en menor medida en las lenguas celtas, toutā y treb- constituyen el campo semántico de “comunidad”, “pueblo” y “casa” ( Rev. Paleohispánica, nº 1. Zaragoza 2001 p. 191)
[6] Con todo tipo de reservas, no convendría dejar de lado la posibilidad de que el nombre de Palma (Palma de Mallorca), esté relacionado con la raíz paleo europea *PAL que significa “agua estancada”, “charca”, “estanque”. Ya Krahe preconizó que *PAL equivalía a “pantano”. También *AMA o *MA es una raíz paleo europea referida al agua. Nada tendría que ver el nombre de Palma con las palmas de la victoria del general Q. Cecilio Metelo, según la tesis tradicional propugnada por Schulten, (R.E. XXXVI, 257ss.) y sí con la “mar petita” antigua desembocadura natural del torrente de “Sa Riera” y los restos prehistóricos que existen bajo la Palma romana. Cobra sentido así la leyenda referida a la cabecita de moro de bronce colocada en la calle Jovellanos, en la confluencia entre el Borne y la Plaza Joan Carles I y que pasaría a indicar no actos públicos de cortar cabezas de prisioneros moros como se dice, sin documentar, sino símbolo popular de un antiguo topónimo referido al “cap” o principio de esta zona pantanosa. El “cap del möor”. Igual que “Es cap des Moro” al final de la “zona pantanosa” o “moor” de “S´amarador” y “Na Mera” en Santanyí.
Esto explicaría también otro topónimo del Repartiment: “Palma alta” en la zona de Son Sardina”. Ejemplos de hidrónimos existen muchísimos: El latín “Palus” pantano, el griego “Palkos” fango, el lituano “Palios” tierras pantanosas, el letón “Palas” orillas encharcadas o pantanosas, el a. I. Palvala = pantano etc.
Bastantes ríos peninsulares llevan esta raíz: Arroyo Palanca (Vilches, Jaén),Arroyo Palancon ( Almería), Palantia o actual Palencia, (referido al río Carrión), río Palancia en la provincia de Valencia, río Palancar y arroyo del Palancar en Córdoba, arroyo Palancares en Jaén, Palancar en Málaga etc. El Palmer en la albufera de Valencia, “Es Palmer” en las lagunas de “Ses Salines” en Mallorca. Lo corriente era recurrir a pequeños topónimos indígenas latinizados, cuando la ciudad venía a continuar unos núcleos anteriores, aunque hubiese alguna variación en el emplazamiento
[7] “Traba” en Coruña, “Trabada” en Lugo y Asturias, “Trabadillo” y “Trabanca” en Salamanca, “Trabaledo” en León, “Trebago” en Soria. etc. Puede consultarse: Fco. Villar, Revista Kalathos, 13-14, Teruel 1993-95, pp. 355-388), (Blanca Prósper. “El Teónimo paleohispano Trebarune”, Revista Veleia, 11, pp.187-196, 1996).(S. Lambrino: “La déese celtique Trebaruna”, Buletin des études portugaises, 20, 1957, pp. 87-109). / A. Tovar en “Études Celtiques nº11,237-268, 1967)