miércoles, 20 de agosto de 2008


De otros mares


Y conseguir la libertad
a golpes de tristeza,
vagando errante bajo las estrellas.
En no sé que mar
de no sé que tierras.
Isla de Gran Canaria



Pensamiento de lava seca
lanzado al viento del Atlántico,
desde una playa de arena negra.
Rocas y fuego
junto a un Teide, altivo y puntiagudo.
Y un vaso de vino
que dejaba,
sabor de azufre en la boca.
Una altura,
una ola.
Así fue el poema.
Santa María del Teide (Tenerife)